Lanzada en el año 2012, fue una campaña dirigida a hombres jóvenes en la vivencia de su sexualidad segura y sin violencia, que promueve el uso del condón para la prevención de embarazos en adolescentes y el respeto a las decisiones de la pareja sexual. Los mensajes de la campaña incorporó audiovisuales en español, miskito y creolle. Con el apoyo de Save the children y el UNFPA.